En nuestra rutina diaria del cuidado del cutis no puede faltar una crema hidratante. Depende de nuestro tipo de piel y nuestras necesidades, esta crema, se aplica por la mañana o bien mañana y noche.
Por lo general, una crema hidratante tiene la función de aportar, como su palabra indica, agua suficiente para mantener su elasticidad. Además, dependiendo del resto de activos que se acompañan en la fórmula, retienen la humedad, protegen la piel de agresiones externas, la suavizan y la preparan para, por ejemplo, maquillarnos posteriormente.
Pero más allá del uso habitual y necesario de las cremas hidratantes, existen otros productos que nos van a proporcionar cuidados extras a nuestra piel.
Os vamos a hablar de 3 imprescindibles…